Los titulares de visas temporales que han estado viviendo y trabajando en Australia durante más de un año ahora pueden retirar hasta $10,000 de sus fondos de jubilación.
La decisión fue anunciada por el ministro de Inmigración de Australia, Alan Tudge, como parte de una serie de nuevas medidas para ayudar a los residentes económicamente afectados por el brote de COVID-19.
“De acuerdo con los cambios que se están realizando para los ciudadanos australianos y los residentes permanentes, la mayoría de los titulares de visas temporales con derechos laborales ahora podrán acceder a su jubilación australiana para ayudarse a mantenerse durante esta crisis”, dijo Tudge.
Los ciudadanos australianos y los residentes permanentes, así como los neozelandeses con jubilaciones australianas, ya tuvieron la oportunidad de acceder a sus fondos en medio de la crisis del COVID-19.
Los estudiantes internacionales con derechos laborales que han estado en Australia por más de un año también pueden obtener acceso anticipado a sus supers. Normalmente, habrían podido acceder a él solo al salir del país.
A los estudiantes internacionales también se les permite trabajar más horas a partir de mayo en lugares como centros de cuidado de ancianos y supermercados. Más de 20.000 estudiantes internacionales de enfermería en Australia podrán trabajar 40 horas en quince días, por lo que pueden ayudar a sobrellevar el brote de la pandemia.
Sin embargo, a pesar de que el gobierno australiano ha ofrecido ayuda a los residentes actuales con derechos laborales, se aconsejó a los titulares de visas temporales que han perdido sus trabajos que regresen a sus países de origen .
La última afirmación fue criticada por la primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern , quien pensó que Australia debería hacer más para ayudar a sus residentes temporales, la mayoría de los cuales son neozelandeses.
También se aconsejó a los turistas y cualquier persona con una visa de vacaciones de trabajo o de mochilero que no podrá mantenerse durante los próximos seis meses que se vayan «lo antes posible».
Debido al brote de coronavirus, es posible que alrededor de 2,4 millones de titulares de visas en Australia tengan que extender sus visas.
Como parte de sus medidas para hacer frente al brote de COVID-19, Australia cerró las fronteras internas de sus estados : los residentes no podrán moverse de un estado a otro por el momento.