Frases como «terminación del empleo», «ser despedido» o «renunciar a mi trabajo» no son palabras que quiera escuchar en el lugar de trabajo, pero suceden. Cuando lo hace, debe manejarse con cuidado y diligencia debida para mantener el cumplimiento. En esta publicación, discutiremos las cláusulas de terminación y cómo implementarlas correctamente en su estrategia de expansión global.
Importancia de las cláusulas de rescisión
Los empleadores internacionales deben estar al tanto de las regulaciones laborales sobre la terminación del empleo en cada país en el que tienen operaciones. En casi todos los países excepto en los Estados Unidos, es muy común tener un contrato de trabajo por escrito que detalla los términos y condiciones de la relación laboral entre un empleador y un empleado. Muchos empleadores de EE. UU. evitan los contratos de trabajo por escrito y, en cambio, prefieren las «cartas de oferta» con pocas condiciones de empleo y cláusulas a voluntad.
El empleo a voluntad rara vez existe fuera de los Estados Unidos. Por lo tanto, es muy importante que los empleadores y empleados internacionales presten atención a las cláusulas de rescisión al finalizar una relación laboral.
Gestión de cláusulas de rescisión internacional
Los contratos de trabajo internacionales a menudo incluyen una sección dedicada a los requisitos de terminación. Estas cláusulas de rescisión generalmente cubren los períodos de notificación requeridos, las obligaciones de despido y los motivos de rescisión. Los detalles varían de un país a otro, por lo que es imperativo que los empleadores investiguen las leyes laborales locales antes de ingresar a un país.
Por ejemplo, en Japón , los empleadores deben dar un aviso de despido con al menos 30 días de anticipación o proporcionar el pago de 30 días de salario base en lugar del aviso. Esta práctica es común en toda Asia y Europa.
En Myanmar , los empleados despedidos por preaviso o sin culpa tienen derecho a indemnizaciones por despido en función de sus años de servicio.
En Indonesia , el gobierno regula estrictamente las terminaciones. La ley requiere que un empleador haga todo lo posible para evitar la terminación del empleo. Esto significa que la terminación debe acordarse mutuamente y el empleador está obligado a discutir el plan de terminación con el empleado individual o el sindicato existente en la empresa. Si dicha discusión no logra resolver un acuerdo mutuo, el empleador debe buscar el permiso del gobierno para despedir al trabajador. Además, si un empleado decide renunciar, debe dar un aviso mínimo de 30 días.
Antes de despedir a un empleado, lea atentamente las cláusulas de terminación y tome las medidas necesarias para garantizar que la terminación se realice de acuerdo con las leyes laborales locales. Las consecuencias de no cumplir con los requisitos locales de terminación pueden variar desde fuertes multas hasta juicios costosos.
Asegúrese de que sus contratos de trabajo internacionales cumplan desde la fecha de inicio hasta la terminación. Forme un equipo con los expertos de Velocity Global para ayudarlo a administrar las cláusulas de rescisión y garantizar una expansión global exitosa.